miércoles, 30 de diciembre de 2009

Año nuevo!

Este cambio de año coincide con la luna llena. El nuevo período empieza entonces con mucha energía. Por estas fechas se hace mucho aunque no pase nada tan importante. Se consigue mucha energía porque quedan grandes rezagos del solsticio. De hecho, ahora ha pasado y se nota y en el hemisferio norte nos alegramos (la mayoría inconscientemente) de que haya cada día un poco más de luz, pero al mismo tiempo tenemos muy presentes los sentimientos pesados, oscuros y de necesidad que ha dejado toda la oscuridad de la última semana.

Todo esto junto es buen caldo de cultivo para despedir y recibir una nueva etapa económica. Los verdaderos ciclos de nuestro planeta están escondidos detrás de los símbolos de nuestras culturas, pasan prácticamente desapercibidos.

Obviamente la economía no es secundaria y cada año tiene (o al menos estudiamos) la suya. Que va por ciclos dicen muchos académicos. Que va como quieran los más fuertes pienso yo. Por eso en esta época está bien descansar para seguir ejercitándose y llevarla por el rumbo que queremos. Las mejores energías para los que leen esto y quieren hacer de este mundo un sitio mejor para todos!

Les mando abrazos, besos y todo eso que se suele repartir por montones unos días y se escatima o desdeña los demás!!

martes, 29 de diciembre de 2009

Espacio

Pasamos nuestro tiempo "libre" tratando de encontrar un sitio donde nuestra alma se sienta cómoda o intentando amoldarla para que no la opriman los lugares que frecuentamos. El estudio, el trabajo, el diálogo, las drogas, el arte ... pocas veces traen algún progreso. Qué agradables y sólidas se ven las instituciones, pero usualmente sólo en sus resquicios se encuentra algo de tranquilidad.

viernes, 25 de diciembre de 2009

Escencia religiosa

Aunque quizás no valga la pena ocuparse de ellas, sigue siendo cierto que todo lo que vive, todo rudimento de existencia participa de una escencia religiosa. Precisemos el sentido de la palabra: es religioso todo lo que nos impide hundirnos, toda mentira que nos protege contra nuestras irrespirables certezas. Cuando me arrogo una parte de eternidad y me imagino una permanencia que me implica, pisoteo la evidencia de mi ser frágil y nulo, miento a los otros como a mi mismo. Si actuase de otra manera desaparecería inmediatamente. Duramos en tanto duran nuestras ficciones. Cuando las ponemos en claro, nuestro fondo religioso se desvanece. Existir equivale a un acto de fe, a una protesta contra la verdad, a una plegaria interminable...


E.M. Cioran.

domingo, 20 de diciembre de 2009

Responsabilidad

Como a muchos carecen de espíritu de lucha y los posee una pereza incurable, prefieren no aprender el significado completo de las palabras e ir por la vida embutiéndose definiciones a medias. La responsabilidad es de suma importancia, pero la entienden sólo relacionada con los deberes y por fuera del mundo de los placeres. Es vital trabajar (entre otros) para ganar un sustento y aportar al bien social, pero es tan saludable (o tal vez más) como explotar al máximo la capacidad de disfrutar, de extasiarse, de alejarse, de contradecir los límites. Desde aquí se insiste con vehemencia en vivir responsablemente. Carpe Diem.

miércoles, 16 de diciembre de 2009

Místicos y artistas

Al fenómeno místico le falta continuidad: se expande , alcanza su apogeo y acaba en caricatura. Tal fue el fracaso del florecimiento religioso en España, Flandes o en Alemania. Si en las artes el epígono a veces logra imponerse, nada por el contrario más lamentable que un místico de segunda categoría, parásito de lo sublime, plagiario de éxtasis. Puede jugarse a la poesía, puede incluso darse la ilusión de la originalidad: basta con haber penetrado en los secretos del oficio. Estos secretos apenas cuentan a los ojos del místico, cuyo arte no es más que un medio. Como no aspira a gustar a los hombres y quiere ser leído más allá, se dirige a un público restringido, bastante difícil y que exige de él más que simple talento o genio. ¿A qué se dedica? A buscar lo que se escapa o sobrevive del desperdigamiento de las experiencias: el residuo de la intemporalidad bajo las vibraciones del yo. Desgasta sus sentidos con el roce de lo indestructible, lo contrario que el poeta que los desgasta por el roce con lo provisional; el uno se abisma casi carnalmente en lo supremo ( la mística: fisiología de las escencias), el otro se deleita en la supericie de si mismo. Dos gozadores en niveles diferentes. Tras haber paladeado las apariencias, el poeta no puede olvidar su sabor; es un místico que, a falta de poder elevarse a la voluptuosida del silencio, se limita a la de la palabra. Un charlatán de calidad, un charlatán superior.

E. M. Cioran.

P.D: La traducción no es mía y el título tampoco.